Quiero compartir otro sueño, no recuerdo la fecha. Soñé que estaba en los aires mirando el Golfo de México y escucho una voz que me dice: “mira lo que va a pasar”. Cuando miro, veo una enorme piedra que cae del cielo en el golfo y levantó un enorme tsunami. Vi esto tres veces en el mismo sueño.
Veía desde la costa de México hasta la Florida como entraba este enorme tsunami.
También vi a un hombre sentado en su bote pescando y como la ola lo arrastraba tierra adentro y desaparecía.
La palabra de Dios habla de una estrella que cae del cielo en:
Apocalipsis 8:10-11
El tercer ángel tocó la trompeta, y cayó del cielo una gran estrella, ardiendo como una antorcha, y cayó sobre la tercera parte de los ríos, y sobre las fuentes de las aguas.
Y el nombre de la estrella es Ajenjo. Y la tercera parte de las aguas se convirtió en ajenjo; y muchos hombres murieron a causa de esas aguas, porque se hicieron amargas.
Veía desde la costa de México hasta la Florida como entraba este enorme tsunami.
También vi a un hombre sentado en su bote pescando y como la ola lo arrastraba tierra adentro y desaparecía.
La palabra de Dios habla de una estrella que cae del cielo en:
Apocalipsis 8:10-11
El tercer ángel tocó la trompeta, y cayó del cielo una gran estrella, ardiendo como una antorcha, y cayó sobre la tercera parte de los ríos, y sobre las fuentes de las aguas.
Y el nombre de la estrella es Ajenjo. Y la tercera parte de las aguas se convirtió en ajenjo; y muchos hombres murieron a causa de esas aguas, porque se hicieron amargas.
Este sueño terminó y tuve otro enseguida.
Soñé que estaba en los aires y escucho una voz que me dice: “mira lo que va a pasar”. Cuando miro, veo una mesa bien grande llena de papeles regados por toda la mesa. Luego escucho la voz que me dice: “mira lo que va a pasar”. Veo un terreno bien grande desértico lleno de muchos edificios como almacenes y una calor y humedad bien fuerte.
Luego vuelvo a ver la mesa llena de científicos, (sé que eran científicos por la manera en que estaban vestidos) y la voz me dice: “escucha lo que hablan”. Cuando presto atención, decían lo siguiente: “No importa lo que hagamos el sol se seguirán calentando y no podemos hacer nada. Nada se puede hacer”. Estaban desesperados y preocupados tratando de conseguir la manera de evitar que el sol se calentara.
Soñé que estaba en los aires y escucho una voz que me dice: “mira lo que va a pasar”. Cuando miro, veo una mesa bien grande llena de papeles regados por toda la mesa. Luego escucho la voz que me dice: “mira lo que va a pasar”. Veo un terreno bien grande desértico lleno de muchos edificios como almacenes y una calor y humedad bien fuerte.
Luego vuelvo a ver la mesa llena de científicos, (sé que eran científicos por la manera en que estaban vestidos) y la voz me dice: “escucha lo que hablan”. Cuando presto atención, decían lo siguiente: “No importa lo que hagamos el sol se seguirán calentando y no podemos hacer nada. Nada se puede hacer”. Estaban desesperados y preocupados tratando de conseguir la manera de evitar que el sol se calentara.
Luego la voz me dice: “mira lo que va a pasar”. Veo el terreno antes descrito y comienzo a ver como unos rayos potentes del cielo comienzan a pulverizar todo lo que encontraban a su paso.
Había un hombre sentado en la azotea de un edificio y cuando el rayo lo tocó, vi la piel y los músculos derretirse, nervios hasta que quedó en un esqueleto, luego se pulverizó. ¡¡Yo quedé espantada!!! Luego escuché la voz decir: “esto es lo que va a ocurrir”. Fue bien feo.
Esto también está en la Palabra de Dios:
Apocalipsis 16:8-9
El cuarto ángel derramó su copa sobre el sol, al cual fue dado quemar a los hombres con fuego.
Y los hombres se quemaron con el gran calor, y blasfemaron el nombre de Dios, que tiene poder sobre estas plagas, y no se arrepintieron para darle gloria.
Dios les bendiga,
Damary Cordero (Puerto Rico)
Había un hombre sentado en la azotea de un edificio y cuando el rayo lo tocó, vi la piel y los músculos derretirse, nervios hasta que quedó en un esqueleto, luego se pulverizó. ¡¡Yo quedé espantada!!! Luego escuché la voz decir: “esto es lo que va a ocurrir”. Fue bien feo.
Esto también está en la Palabra de Dios:
Apocalipsis 16:8-9
El cuarto ángel derramó su copa sobre el sol, al cual fue dado quemar a los hombres con fuego.
Y los hombres se quemaron con el gran calor, y blasfemaron el nombre de Dios, que tiene poder sobre estas plagas, y no se arrepintieron para darle gloria.
Dios les bendiga,
Damary Cordero (Puerto Rico)
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