Una pureza de 20% en la refinación de uranio está a un corto paso técnico del grado requerido para armamento nuclear y la actividad genera sospechas en Occidente respecto a que el programa que Irán asegura que es pacífico es en realidad una fachada para el desarrollo de arsenal atómico.
EL UNIVERSAL
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jueves 25 de octubre de 2012 11:27 AM
Teherán.- Irán parece haber casi finalizado la instalación de centrífugas en su planta nuclear subterránea, lo que podría elevar su capacidad de obtener uranio refinado al nivel necesario para fabricar armas atómicas si quisiera hacerlo, dijeron diplomáticos occidentales.
La república islámica reveló en el 2009 la existencia de la planta de Fordow, construida dentro de una montaña para protegerla de ataques aéreos, tras enterarse de que servicios de espías occidentales la habían detectado, resaltó Reuters.
Estados Unidos y sus aliados están particularmente preocupados sobre Fordow debido a que Irán está refinando uranio ahí a una concentración físil de un 20%, un material que según Teherán es necesario para operar un reactor médico.
Los diplomáticos afirmaron haber recibido indicios de que Irán ya instaló las últimas 640 centrífugas de uranio de un total planeado de cerca de 2.800 en el sitio, pero aún no ha comenzado a usarlas.
"Entiendo que han instalado todas las centrífugas ahí", comentó un enviado.
Otro diplomático dijo que también creía que las centrífugas habían sido colocadas en posición, pero que aún no se habrían completado otros preparativos necesarios para operarlas.
Una pureza de un 20% en la refinación de uranio está a un corto paso técnico del grado requerido para armamento nuclear y la actividad genera sospechas en Occidente respecto a que el programa que Irán asegura que es pacífico es en realidad una fachada para el desarrollo de arsenal atómico.
Cualquier medida de Irán para aumentar la producción en Fordow alarmaría aún más a Estados Unidos e Israel, que se han reservado la opción de usar fuerza militar para impedir que Teherán consiga una bomba atómica, y también complicaría esfuerzos diplomáticos intermitentes por resolver la disputa.
No había comentarios inmediatos de parte de Irán ni de la Agencia Internacional de Energía Atómica (IAEA, por su sigla en inglés), el regulador de la ONU con sede en Viena, que se espera emita su próximo informe sobre el programa nuclear de Teherán a mediados de noviembre.
Las actividades de diplomacia y varias rondas de sanciones económicas no han logrado poner fin a la disputa de una década, aumentando los temores sobre una acción militar israelí contra su archienemigo y que una nueva guerra en Medio Oriente dañe a la frágil economía mundial.
Según analistas, Irán ya posee suficiente uranio levemente enriquecido para varias bombas nucleares si el material fuera refinado a un alto grado, pero
La república islámica reveló en el 2009 la existencia de la planta de Fordow, construida dentro de una montaña para protegerla de ataques aéreos, tras enterarse de que servicios de espías occidentales la habían detectado, resaltó Reuters.
Estados Unidos y sus aliados están particularmente preocupados sobre Fordow debido a que Irán está refinando uranio ahí a una concentración físil de un 20%, un material que según Teherán es necesario para operar un reactor médico.
Los diplomáticos afirmaron haber recibido indicios de que Irán ya instaló las últimas 640 centrífugas de uranio de un total planeado de cerca de 2.800 en el sitio, pero aún no ha comenzado a usarlas.
"Entiendo que han instalado todas las centrífugas ahí", comentó un enviado.
Otro diplomático dijo que también creía que las centrífugas habían sido colocadas en posición, pero que aún no se habrían completado otros preparativos necesarios para operarlas.
Una pureza de un 20% en la refinación de uranio está a un corto paso técnico del grado requerido para armamento nuclear y la actividad genera sospechas en Occidente respecto a que el programa que Irán asegura que es pacífico es en realidad una fachada para el desarrollo de arsenal atómico.
Cualquier medida de Irán para aumentar la producción en Fordow alarmaría aún más a Estados Unidos e Israel, que se han reservado la opción de usar fuerza militar para impedir que Teherán consiga una bomba atómica, y también complicaría esfuerzos diplomáticos intermitentes por resolver la disputa.
No había comentarios inmediatos de parte de Irán ni de la Agencia Internacional de Energía Atómica (IAEA, por su sigla en inglés), el regulador de la ONU con sede en Viena, que se espera emita su próximo informe sobre el programa nuclear de Teherán a mediados de noviembre.
Las actividades de diplomacia y varias rondas de sanciones económicas no han logrado poner fin a la disputa de una década, aumentando los temores sobre una acción militar israelí contra su archienemigo y que una nueva guerra en Medio Oriente dañe a la frágil economía mundial.
Según analistas, Irán ya posee suficiente uranio levemente enriquecido para varias bombas nucleares si el material fuera refinado a un alto grado, pero
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